Diffusión ultrasónica: productos de alta perfumería, incienso, aceites esenciales

Este tipo de aparato representa la excelencia en lo que respecta a la difusión de los aceites esenciales.

Los estudiosos de la aromaterapia saben perfectamente que hasta la fecha no existe otro método mejor para difundir, sin alterarlos, los principios activos naturales contenidos en los aceites esenciales: nada mejor para conseguir a través del olfato un absoluto bienestar emocional.

El sistema es tan simple como eficaz: en el interior del aparato común se vierte agua del grifo (ver demo) y pocas gotas de aceite esencial; cuando se enciende, gracias a los ultrasonidos de baja frecuencia de la que es centro, el agua se divide en diminutas gotas que se evaporan de inmediato, arrastrando consigo en el aire minúsculas gotas de aceite esencial: de esta manera éste último es absorbido en la atmósfera sin haber sufrido el clásico (y destructivo) "estrés térmico" (es decir el que acarrean los aparatos de difusión comunes con vela y/o con resistencia eléctrica).

Con esta tecnología en frío se logra obtener un "aerosol oficinal" valioso, puesto que se obtiene protegiendo la integridad de los principios activos naturales del aceite esencial (o de los aceites esenciales), sin que estos sean degradados en absoluto.

El Difusor Ultrasónico cumple además la función de regulador hidrométrico para ambientes (humidificador).


Muy silencioso y escenográfico (gracias a la alternación continua de diferentes colores), cuando está en funcionamiento, optimiza la oxigenación ambiental puesto que ioniza la atmósfera de manera totalmente análoga a como sucede en la naturaleza, en la selva o cerca de cascadas y rápidos.

Sólo seis gotas de aceite esencial (y poca agua) bastarán para crear una marcada atmósfera olfativa a un ambiente de más de 60 m² ¡por muchas horas!